CADELPO Nº1 / Abril 1995

BOLETIN OFICIAL de la «CASA DEL POETA PERUANO», Creada por Ley 24616,
editado por la Dirección Nacional de Publicaciones


PALABRA

Se nos ha encomendado la publicación de este Boletín al que hemos bautizado «CADELPO», siglas de nuestra Casa.

Sabemos que es grande la responsabilidad de llevar la palabra oficial de una Institución, y aceptamos el reto. Número a número iremos poniendo lo mejor de nosotros, iremos mejorando, demostrando, con insistencia, con perseverancia y continuidad, que podemos ser una voz clara que llegue a todos los poetas de Perú y, por qué no, a todos los que en cualquier parte del mundo cultiven y aprecien la poesía, sea cualquiera la forma que adopte, porque «poesía» no sólo significa «verso»; poesía es, sobre todo, una forma de sentir el mundo y una manera de vivir.

Dos son las metas que en este punto nos trazamos; la primera, informar al mundo de nuestras actividades; la segunda, la que más queremos y nos obliga más, difundir las creaciones de todos los que quieran compartir con nosotros este camino.

Las páginas de esta publicación darán cabida a todos los poetas, peruanos o extranjeros, que así lo quieran.

Escríbannos, aquí todos somos aprendices, y recibimos gustosos a cualquiera que venga cargado de buena voluntad y de entusiasmo. No les fallaremos.

Palabra.


TOMARA JURAMENTO NUEVA JUNTA DIRECTIVA NACIONAL

En la noche del 15 de abril, como cierre a las actividades del «Día del Poeta», se realizará la juramentación de la Nueva Junta Directiva Nacional de la Casa del Poeta Peruano (1995-1997), el evento se llevará a cabo en el auditorio de la Federación de Empleados Bancarios del Perú.

Cabe señalar que en la Segunda Asamblea General de Delegados, realizada en la ciudad de Lima el día 24 de febrero de 1995, se reeligió por unanimidad a nuestro Presidente, José Guillermo Vargas, y a varios de los miembros de la Junta Directiva anterior, entre ellos, a la Coordinadora Nacional, Ligia Balarezo.

En el informe presentado a la Asamblea de Delegados, el Presidente reseñó las actividades realizadas por la CADELPO, entre otras podemos resaltar el I Encuentro Internacional y el VI Nacional de Poetas «Juan Ojeda Ojeda», realizado en la ciudad de Chimbote, que convocó a trece delegaciones extranjeras, la creación de la Casa del Poeta Chileno-Peruano y de la Confederación de Poetas Perú-Bolivianos, y la ardua labor editorial de la Casa, que incluye, publicación de libros de poetas peruanos, antologías de poetas chilenos y bolivianos y la serie de difusión internacional «Poesía al Paso»


PRIMERA GRAN MARATON POETICA

El día sábado 15 de abril, con motivo de la celebración de «EL DIA DEL POETA», la «Casa del Poeta Peruano» ha organizado la «Primera Gran Maratón de Poetas»,a realizarse en el auditorio de la Federación de Empleados Bancarios del Perú, ubicado en la calle Máximo Abril 646, Jesús María, Lima.

Se ha previsto un programa ininterrumpido que comprenderá recitales poéticos y musicales, presentaciones de libros, revistas y plaquetas y exposiciones plásticas. El horario será desde las 9:00 de la mañana hasta las 10:00 de la noche.

Todos los interesados en participar en esta «maratón» pueden inscribirse llamando a los números telefónicos 466-0519, 423-9142, 437-2141 ó 465-0871, para hacer las coordinaciones respectivas.La invitación es abierta al público en general y el ingreso es libre.


JUNTA DIRECTIVA NACIONAL
(Período 1995 – 1997)

Presidente
José Guillermo Vargas Rodríguez

Vice-Presidente
César Angeles Caballero

Coordinadora Nacional
Ligia Balarezo Mezones

Secretario General
Antonino Vidal Vidal

Director de Economía
Miguel Carrillo Nateri

Director de Relaciones Exteriores
César Salomón Herrada

Director de Prensa y Comunicaciones
Roberto Espinosa

Director de Publicaciones
José Luis Mejía

Director de Archivo
Jesús Angel García

Director de Asistencia Social
Leoncio Bueno

Director de Literatura Infantil y Juvenil
Alfredo Cateriano

Vocal
Wilmer Villarreal

Asesores Académicos
Manuel Pantigoso
Manuel Velázquez
Luis Hernán Ramírez
Winston Orrillo

Asesores Legales
Mirtha Lora
Iván Rodríguez


CASA DEL POETA PERUANO
(Creada por Ley 24616, con Reglamento otorgado por el DS-021-90-ED)

Presidente:
JOSE GUILLERMO VARGAS


Con sedes en:
Arequipa
Callao
Chimbote
Huaraz
Lima
Paita
Pucallpa
Tacna
Trujillo
Tumbes
Con Representación en:
Cusco
La Paz (Bolivia)
Valparaíso (Chile)


Sección las promesas

RENATO CISNEROS (Lima, 1976)

HISTORIAS DE PARQUE
a mis amigos de Pomalca

1.
Un puñado de niños descansa al pie de un árbol.
El verano ha sido generoso en alegrías.
Un tiempo hermoso y transparente que crece todavía en nuestros pies.

Sobre una escalera negra o apoyado en unas rejas
esas horas golpean como un cercano recuerdo.
Y para siempre sus cuerpos
caerán dulcemente en la memoria de mis ojos.

2.
Hemos vivido en redor de una pelota.
Por ella perdimos cierta especie de ilusión.
Con ella encontramos la otra orilla de ese tiempo.
A partir de entonces fuimos malos,
aprendimos de la música, de la cerveza y del breve amor.
Olvidamos las pequeñas palabras que antaño nos juntaron.

Hemos vivido en redor de una pelota.
Hemos conocido el imperio del cuerpo.

3.
Una canción atraviesa el cuarto
y luces de colores punzan nuestros rostros.
En una esquina nuestra memoria está limpia.
Porque nunca se olvida la primera vergüenza,
ni la primera niña que tocó tus ojos una tarde.
Porque a pesar de todos los recuerdos y de ninguna penumbra
el cuerpo mantiene
el silencio invisible de la primera canción.

4.
El Reino de Mauricio y de Javier difícilmente se descubre.
Yo ignoraba su lenguaje,
como el nombre de los perros que han envejecido junto a ellos.
Ni qué decir de Rafael,
un niño alto de espesa barba, que habita una torre amarilla.

Cuando un muchacho tiene doce años
anhela dos cosas: un parque y un amigo.

Yo llegué a este lugar cuando tenía doce
entonces, todo lo encontré debajo de unos árboles
y lo sembré para siempre entre mis manos.

5.
Ningún espejo nos dice la verdad.
Ahora somos otros, es decir, los mismos
pero menos veloces.
Miramos mujeres, nombramos un lugar, negamos hechos,
elegimos una hora para hacerla interminable.
Nadie nos entiende.
Pero tan sólo con mirarnos adivinamos muchas cosas.

6.
Un instante
siempre es un instante cuando sucede.

Un puñado de hombres descansa al pie de un árbol.
Contemplan el fantasma de su infancia extendido en un parque,
el oscuro reflejo de los años.

Ahora conocen la verdadera soledad,
ahora caminan entre estrellas y palomas.


Sección los libros que se vienen…

TRAS LOS MUROS DEL DESVARIO
a Rafo y Diego Alonso

Aquí está mi vástago, he elegido la cautela para seguir adherido a esta vida con otra, me he arrastrado en la penumbra para que no me cercene la infundia. Lo dejo aquí, en las crestas del viento, a la luz de los espejos, en la lengua de los ojos, ¡véanlo!, suena a pálpito y realidad; es mío, he traspuesto la ausencia, su eco y sus brazadas para erigir esta autoría.

He aquí mi presencia desperdigada en todas las llanuras del querer. Revisa sus manos, sus movimientos minuciosos de contingencia, sus formas de papel y hierro. Observa su candor finito, óyele su fuente primigenia, escucha sus chasquidos, sus clamores de raíz, su aparición entonada. Arrodíllate ante la vida, ante la hechura de la persistencia, ha emergido su vastedad y su confín. Reza la oración de todos los principios en la playa de los designios, despréndete de las obsolencias, nace tú también.

Aquí tenéis a mi hijo, la piel formada de mis certezas; he trasnochado en silencio tras los muros del desvarío para no ver muerta en la arena mi sangre prolongada. Es el brote del calor cardinal, la pisada certera de la esencia. Mi fruto es el grito de algún dios levantado con agujas y con fuego, el ruido perfecto de lo humano.

He recorrido largas noches de espasmo bajo la tierra, he aglutinado el cielo entre mi boca y mis manos, he despejado la sangre de la impotencia en nombre de mi ventura y, finalmente, se me ha otorgado, en la finura de los espacios y las formas, el título que otorga la reina savia de las matrices, se me ha llamado, Padre.

He elegido para mi hijo el nombre de la reciedumbre.

Del libro «ALMACEN DE INVIERNO»
RICARDO AYLLON (Chimbote, 1969)